Empezaremos por decir que no hay nada mejor que conocer perfectamente a nuestros niños para detectar algún mal como dolores de cabeza, estrabismo o retraso escolar, lo cual, pueden ser señales claras de deficiencia visual en los pequeños. Entre cerrar los ojos o inclinar la cabeza son indicadores con los que podrías descubrir algún problema.

Para ser miope no hay una edad determinada; sin embargo, estos son los síntomas más comunes que indican la miopía en los menores. Si detectas alguno, ¡visítanos cuanto antes! Nosotros podemos ayudar a quien más quieres.

No ver el pizarrón
Estos pequeños quizá ya eran miopes, pero hasta la vida escolar lo notan. Esto es común puesto a que, en su vida previa a un salón de clases, el entorno en el que se desenvuelven puede ser tan cercano como ellos quieran.

Retraso escolar
El no reconocer a sus papás a la salida del colegio o no saber identificar de que trata la clase por no ver, le provoca a los menores un rezago en comparación de sus compañeros de clase.

Es un claro síntoma de miopía: estira el cuello y echa la cabeza hacia delante para mirar, achina los ojos.

Herencia
Si alguno de los padres del menor es miope, es importante que los exámenes se hagan con regularidad especialmente si uno de ellos es miope magno; es decir, más de seis u ocho dioptrías.

Aislamiento
Podría ser por muchas causas, pero una de ellas quizá sea que no ve bien y ello lo que le impide relacionarse con normalidad.

Estrabismo
Hablamos del famoso ojo vago, más común con hipermetropía que con miopía.

Cefaleas
Son más habituales en hipermétropes, pero también se dan en niños miopes.